¿Es lo mismo un trabajo vertical y uno en altura? ¿Requieren del mismo equipamiento y la misma formación? Aunque a menudo se utilizan como términos equivalentes, no son iguales, ni mucho menos. En este artículo lo descubrirás, pues te mostramos una semejanza y tres diferencias entre los trabajos verticales y en altura: el acceso y posicionamiento, el equipamiento y la formación.

Una semejanza entre trabajos verticales y en altura

Se puede decir que todos los trabajos verticales son trabajos en altura… pero no todos los trabajos en altura son verticales. En ambos casos, debe haber 2 metros o más de distancia con respecto al suelo (o por debajo de él, si se trata de un pozo, foso, etc.) para ser considerado como tal. Se trata de una distancia que, en una eventual caída, puede provocar serios daños para el trabajador, de no contar con los adecuados sistemas de seguridad y protección.

3 diferencias entre ambos tipos de trabajo

Conocida la principal semejanza, conviene fijarse en las diferencias entre los trabajos verticales y en altura para comprender mejor en qué consiste cada uno.

#1. El acceso y posicionamiento

El acceso y posicionamiento de un trabajo en altura no tiene por qué ser necesariamente de gran complejidad, y a menudo puede resolverse con estructuras al efecto, como andamios o escaleras. En cambio, un trabajo vertical se desarrolla siempre en lugares de difícil acceso y posicionamiento, y ello obliga al trabajador a permanecer totalmente o en parte suspendido en el aire. Algunos de los lugares donde se realizan los trabajos verticales son pozos, fosos, paredes rocosas naturales, fachadas de edificios, puentes, etc.

#2. Los elementos de protección individual (EPIs)

Los trabajos verticales y en altura están sujetos a una normativa muy estricta en cuanto a prevención de riesgos laborales se refiere, y todo el equipamiento debe minimizar al máximo dichos riesgos. Sin embargo, en muchos casos el trabajo en altura puede realizarse de manera segura con equipos de protección colectiva, como barandillas o redes, junto con otros elementos básicos de protección individual como casco o guantes. En cambio, esto nunca es suficiente en el caso de los trabajos verticales, donde se requerirá un equipo integral anticaída que, mediante cuerda, arnés y otros elementos, le permita estar sujeto en todo momento.

#3. La formación

Por último, otra diferencia entre los trabajos verticales y en altura está en la formación: si bien la formación en altura es la base de todo, quienes decidan orientarse a los trabajos verticales deberán someterse a una formación más exigente y especializada porque estos trabajos también entrañan mayores riesgos. Una formación donde, además, se requiere de un importante componente práctico, puesto que para desarrollar con seguridad estas tareas será preciso tener un gran dominio del propio cuerpo y del espacio.
Al hilo de esta última diferencia entre trabajos verticales y en altura, te recordamos que GEPCO Formación cuenta con cursos específicos para unos y otros. Por un lado, el Curso de Trabajos en Altura, con una duración de 8 horas, y por otro, el Curso de Trabajos Verticales, con una duración de 12 horas. En ambos casos, se imparten en nuestras instalaciones de Sabadell y Madrid, o bien se pueden organizar In Company, es decir, en el lugar que desee el cliente