Para trabajar con seguridad en altura, el equipamiento no es el único factor que entra en juego. De hecho, tan importantes son la prevención, que está relacionada con la prudencia al actuar, y el dominio de la profesión, que normalmente es el resultado del conocimiento + la experiencia. Eso te enseñamos precisamente en todos nuestros cursos de formación en prevención de riesgos laborales, y más concretamente en el curso de trabajos en altura. Este post trata sobre los factores humanos que hay que valorar en ello y te servirá como breve toma de contacto con lo que abordamos en profundidad en los cursos.

 

El dominio de la profesión, la base

Como empresa formadora, hacemos mucha insistencia en el dominio que se ha de tener sobre una materia para poder desarrollarla correctamente. Por ello, la norma número uno en PRL de trabajos en altura es conocer la profesión y todos los elementos relacionados para llevarla a cabo: herramienta, maquinaria, materias primas, etc. A continuación enumeramos algunos breves consejos que te evitarán más de un disgusto:

 

  • Conocer el equipo de seguridad necesario para llevar a cabo la tarea: arneses, cascos, líneas de vida, etc.
  • Saber cómo usar e instalar dichos elementos de seguridad, por ejemplo, cómo establecer puntos de anclaje fijos o móviles, como instalar líneas de vida, etc.
  • Tener claro cómo señalizar y acotar zonas de riesgo, para uno mismo y para los demás
  • Conocer las características de la maquinaria y las herramientas a utilizar: por ejemplo, cómo se acciona, cuál es su sistema de inicio seguro, etc.
  • Conocer y respetar la carga máxima de maquinarias y estructuras, como una plataforma elevadora, carretilla frontal, etc. 
  • Saber cuál es la capacidad máxima de operarios en un espacio en altura, como un andamio o una cesta
  • Saber discernir cuándo una superficie está en buen estado y cuándo no, ya sea por eventuales roturas o resbalones, desprendimientos, etc.
  • Conocer el grado de aislamiento de un equipo eléctrico y cómo es posible activarlo o desactivarlo para evitar accidentes

 

La actitud, clave en PRL de trabajos en altura

Sin embargo, saber los secretos técnicos de la profesión no te garantiza inmunidad a los accidentes laborales. La otra norma básica en PRL de trabajos en altura es adoptar una actitud prudente que evite excesos de confianza. Estos son algunos de los muchos consejos que debes tener siempre presentes y que tienen más que ver con el sentido común que con los conocimientos técnicos:

 

  • Prestar atención a las condiciones meteorológicas, en especial al viento (que en altura es mucho más notorio)
  • Verificar visualmente el correcto estado de los equipos de seguridad
  • Comprobar que dicho equipo está bien puesto, montado y asegurado, en especial los conectores
  • Recoger adecuadamente la herramienta tras su uso para no provocar caídas propias, la de otros compañeros o la caída misma de la herramienta
  • No realizar tareas de riesgo sin la explícita aprobación del mando superior
  • No ingerir nada que pudiera modificar el equilibrio y la coordinación de movimientos, como ciertos medicamentos o alcohol
  • No trabajar a un ritmo excesivamente alto, que pudiera conllevar la pérdida de precisión y control en los movimientos a realizar
  • Limitar el tiempo de exposición al riesgo y, a ser posible, trabajar con la presencia y ayuda de otro compañero
  • No utilizar una herramienta por primera vez en altura: su toma de contacto ha de realizarse en un lugar seguro, sin riesgo a caídas

 

Todo ello y muchos otros consejos los abordamos a fondo en nuestros cursos de PRL en trabajos en altura. Y además, impartimos otros cursos de interés en este y otros sectores, como los de primeros auxilios, que te permitirán dar un tratamiento adecuado a un operario en los primeros momentos tras sufrir un accidente o un problema de salud.